La iniciativa establece eliminar todos los fondos fiduciarios que se benefician con el impuesto a los combustibles, y no solamente aquel vinculado a la obra pública, y actualizar el régimen de reparto de los ATN.
De esa manera, por un lado, las provincias empezarían a recibir el 58,36% de lo recaudado con ese gravamen y, por el otro, el Poder Ejecutivo estaría obligado a repartir de forma automática los aportes del Tesoro.
A pesar de las tensiones, por el momento Francos no tiene previsto recibir nuevamente a los gobernadores en su oficina y, de hecho, dejó las negociaciones en manos del equipo económico, que no logra llegar a un acuerdo.
Si bien, tal como contó Infobae, algunos diputados estaban esperando que este conflicto repercutiera en el Congreso y facilitara la aprobación de algunos proyectos que presentó la oposición, ese es un escenario que a priori no sucedería.
“No creo que haya una acción homogénea y coordinada de los gobernadores para las sesiones de mañana en Diputados y Senado. Cada uno va a hacer lo que le convenga. Lo de la ley de recursos para las provincias es distinto, eso sí lo van a impulsar”, resumió una fuente con contacto directo con varios de ellos.
INFOBAE